¡VIVA LA DIFERENCIA!:
LA IMPORTANCIA DE RESCATAR LO FEMENINO

Ana Luisa Gálvez


Desde tiempos inmemoriales, nosotras, las mujeres, hemos jugado un rol fundamental en el desarrollo de la historia. Tal vez, se nos ha bajado el perfil, o eso creemos, pero lo cierto es que muchos hitos importantes han sido por, para y porque alguna de nosotras ha desencadenado, inspirado, creado y apoyado a alguien o algo. Recordemos a Cleopatra, Juana de Arco, Madame Courie, Frida Kahlo. Nuestras Javiera Carrera, La Quintrala, Gabriela Mistral y Paula Jaraquemada, entre muchas.

Sin embargo, con el correr del tiempo, los cambios sociales y culturales han hecho que ese protagonismo y participación se traslade desde el ámbito familiar, privado, tras bambalinas al plano profesional e intelectual y lo que otrora fuera una lucha con los hombres, se ha transformado en una lucha contra el hombre. Una lucha de géneros dónde, a mi parecer perdemos más de lo que ganamos.

No se piense que soy una machista relegada a las labores del hogar. ¡Por ningún motivo! Pero tampoco considero que, el feminismo y la reivindicación de género sea el camino adecuado para que logremos desarrollarnos plenamente.

Atrás quedaron los tiempos en que las mujeres se convirtieran en fuerza laboral importante, también quedó atrás el paradigma de que sólo servimos para bordar, criar niños y llevar una casa; por lo que esa lucha ya está ganada.

Ahora, debemos pelear por igualdad en las oportunidades laborales, sueldos y reconocimiento. Factores externos que sólo nos hablan del plano material….. Incluso se habla de “la dignidad de la mujer” y “el respeto que se merece una mujer”. Yo me pregunto, ¿no son esos derechos que merecemos todos los seres humanos?

Mis dichos pueden parecer contradictorios pero son absolutamente comprensibles si los analizamos desde la perspectiva del rescate de nuestra feminidad y el reconocimiento del verdadero valor, magia y responsabilidad que esto significa.

Interesante fenómeno es que, recientemente, vimos con la elección de Michelle Bachelet como primera mujer presidenta de la República, lo distorsionadas que están las cosas. ¿Qué me parece? La verdad es que este hecho no significa absolutamente nada. No entiendo por qué las mujeres estaban felices. Demás está recordar las serias falencias que presenta en el plano de la oratoria y las deficientes participaciones que tuvo como ministra. Como mujer, apeló al chabacano y manoseado sentimentalismo del chileno. Realmente vergonzoso, por decir lo menos. Ella representa un conglomerado con líneas ya trazadas, adicto al neoliberalismo y con 16 años de robos, soberbias, tergiversaciones y mentiras. ¿Por qué el panorama tendría que cambiar?

Ahora bien, todas las feministas acérrimas que he conocido tienen algunas características en común: generalmente están solas, se ven amargadas, se expresan con odio contra los hombres y son bastante masculinas. Lo mismo ocurre con las súper ejecutivas: se tiene la pésima convicción que, para competir con los hombres hay que ser como ellos. Feo…. Es feo ver a una mujer “garabateando” como los hombres, agresiva y de ademanes bruscos. A la que sus hijos le reclaman que nunca está con ellos ¿De qué reivindicaciones hablamos si para competir nos amachamos!!!

Definitivamente, el camino no va por ahí. No es esa nuestra lucha. El enemigo no se encuentra en “ellos” como género.

Debemos enarbolar la bandera chilena no compitiendo con los hombres sino que junto a ellos. Nuestra lucha es desde una trinchera distinta: desde nuestra sensibilidad, nuestro sexto sentido, nuestra capacidad de amar, desde nuestra entrega y sabiduría. Puede parecer un cliché pero nuestra fuerza, valentía y arrojo no está en ser un hombre con faldas sino que siendo muy MUJERES. Asumiendo nuestros múltiples roles de madres, trabajadoras y, esposas.

Me encanta ser “mina” y por esto me atrevo a convocar a todas aquellas mujeres que aman a nuestra patria: Nuestro país te necesita. Chile necesita de la vibración femenina para apoyar y acompañar a los hombres en la lucha por un país y un mundo mejor y más justo.

¡VIVA LA DIFERENCIA!


Centro Informativo de ALERTA AUSTRAL - Santiago de Chile - http://www.alertaaustral.cl - 2006